¿Se pueden congelar los granos de café?

La respuesta corta es Sí, pueden, pero no tiene sentido y ¡lo mejor es lo fresco!

Ofrecemos entrega gratuita de granos frescos tostados, ¿por qué lo harías tú? (¡Y si configuras una suscripción, eliminas cualquier posible error!)

¿Aún quieres saber más sobre la congelación? entonces sigue leyendo...

A diferencia de la carne y otros alimentos que, cuando se congelan, detiene la propagación de bacterias. Los granos de café no contienen el tipo de bacterias que descomponen los alimentos. Al considerar preservar las notas del café especial, el oxígeno (no la temperatura) es el mayor enemigo de la frescura y los sabores del café, así que compre granos (y un molinillo) para minimizar la superficie expuesta al aire y guárdelos en un recipiente o bolsa hermética con válvula unidireccional. sistema (¡como el nuestro!). ¡De hecho, el proceso de congelación puede alterar las notas que esperas encontrar!

Aún así, si lo deseas (¿por alguna razón?) puedes congelar los granos, ¡pero ten en cuenta que no es tan sencillo como meter una bolsa de café en el congelador!

A continuación se ofrecen algunas pautas generales para asegurarse de que sus frijoles se conserven lo mejor posible.

  1. Asegúrate de que los frijoles se hayan enfriado a temperatura ambiente antes de congelarlos. Esto ayuda a evitar que se forme condensación dentro del empaque, lo que puede afectar negativamente el sabor y la calidad de los granos.

  2. Empaque los granos correctamente: transfiera los granos de café a un recipiente hermético o a una bolsa para congelador con cierre. Exprima la mayor cantidad de aire posible de la bolsa antes de sellarla para minimizar el riesgo de quemaduras por congelación.

  3. Divídalo en porciones más pequeñas: si tiene una gran cantidad de granos de café, considere dividirlos en porciones más pequeñas antes de congelarlos. Esto le permite sacar solo la cantidad que necesita sin exponer repetidamente todo el lote a las fluctuaciones de temperatura del congelador.

  4. Etiquete y feche el empaque: escriba la fecha de congelación en el paquete para que pueda realizar un seguimiento del tiempo de almacenamiento. Además, etiqueta el paquete con el tipo de granos de café para identificarlos fácilmente más adelante.

  5. Colocar en el congelador: Coloque los granos de café envasados ​​en el congelador, preferiblemente en una sección donde no sean molestados ni expuestos a olores fuertes.

  6. Descongelar y usar granos de café congelados: cuando esté listo para usar los granos congelados, retire la porción deseada del congelador y déjela descongelar a temperatura ambiente. Es fundamental no volver a congelar ninguna porción que haya sido descongelada, ya que esto puede afectar el sabor y la frescura.